Datos personales

Mi foto
Patricia B. Bustos Psicoanalista /Coordinadora de grupos terapeúticos/ Prof. Enseñanza Común y diferencial / Mediadora Judicial / Voluntaria y Socia Activa de Mèdicos del Mundo

lunes, 31 de mayo de 2010

Julio Cortázar

Escritor argentino Nada está perdido si se tiene el valor de proclamar que todo está perdido y hay que empezar de nuevo।Julio Cortázar Nació el 26 de Agosto de 1914 en Bruselas aunque su familia se trasladó muy pronto a Buenos Aires, llegó a Argentina con cuatro años, hijo de padre argentino, agregado comercial en la Embajada Argentina en Bélgica, y madre francesa. Cursó estudios en la Escuela Normal de Profesores Mariano Acosta. En 1932, obtiene el título de Maestro Normal. Tres años más tarde obtiene el título de Profesor Normal en Letras e ingresa en la Facultad de Filosofía y Letras. Fue profesor de Lengua y Literatura francesa en varios institutos de la provincia de Buenos Aires. En 1938, bajo el seudónimo Jorge Denís, publicó su primer libro, Presencia. En 1944 obtuvo un puesto de profesor en la Universidad de Cuyo, donde participó en manifestaciones contra el fenómeno del peronismo. Cuando el general Juan D. Perón ganó las elecciones, abandonó el cargo universitario para no ser despedido y volvió a Buenos Aires, donde trabajó en la Cámara Argentina del Libro. Escribe algunas críticas que se publicaban en revistas como "Huella" o "Canto". Desde fines de los años cuarenta hasta 1953, colaboraría en la revista "Sur", fundada y dirigida por Victoria Ocampo en 1931. Su primer trabajo para dicha revista fue un artículo con motivo del fallecimiento de Antonin Artaud. Cuando a finales de los años 40, la situación en Argentina para los intelectuales era difícil por las constantes intromisiones de la dictadura peronista, Cortázar decidió emigrar y partió hacia París en 1951, año en que consiguió una beca y trabajo como traductor de la UNESCO, que desempeñó hasta su jubilación. Un rasgo importante de su vida es que a raíz de un viaje que realizó a Cuba invitado por Fidel Castro se convirtió en gran defensor y divulgador de la causa revolucionaria cubana, como años más tarde haría con la Nicaragua sandinista. Su primer cuento, La Casa Tomada, fue publicado en 1946 por un periódico literario llamado Anales de Buenos Aires, por iniciativa de su director, Jorge Luis Borges. Una de sus primeras obras, Los reyes (1949), es un poema en prosa centrado en la leyenda del Minotauro. El tema del laberinto reaparece en Los premios (1960), una novela que gira alrededor del crucero que gana un grupo de jugadores en un sorteo. Rayuela (1963), implica al lector en un juego creativo en el que él mismo puede elegir el orden en que leerá los capítulos ordenados de un modo poco convencional. Entre sus restantes obras se encuentran numerosos relatos breves. Las armas secretas (1969), uno de cuyos relatos, 'El perseguidor', se ha convertido en un referente obligado en su obra. A diferencia de las restantes novelas de su autor, El libro de Manuel (1973) gira en torno a temas políticos y humanistas. Murió el 12 de febrero de 1984 en París a causa de leucemia. En su testamento, Cortázar le confió al ensayista y poeta argentino Saúl Yurkievich, amigo personal y a su mujer, Gladis Anchieri, su obra inédita para que la publicaran o la destruyeran, si así lo creían oportuno. Por supuesto, nada ha sido destruido, sino que algunos de esos inéditos han visto la luz y el resto apareció en las Obras completas que constan de nueve tomos, de más de mil páginas cada uno, con numerosos inéditos y todo el material disperso que dejó el autor de "Rayuela". Uno de los autores argentinos más traducidos a otras lenguas, considerado por parte de la crítica internacional como un paradigma de la literatura argentina moderna. A veinte años de su fallecimiento, el Gobierno de la Ciudad estableció al 2004 como “Año Julio Cortázar”.
Antes, después como los juegos al llanto, como la sombra a la columna el perfume dibuja el jazmín, el amante precede al amor, como la caricia a la mano el amor sobrevive al amante pero inevitablemente aunque no haya huella ni presagio, aunque no haya huella ni presagio, como la caricia a la mano el perfume dibuja el jazmín, el amante precede el amor pero inevitablemente el amor sobrevive al amante, como los juegos al llanto, como la sombra a la columna, como la caricia a la mano aunque no haya huella ni presagio, el amante precede al amor el perfume dibuja el jazmín, como los juegos al llanto, como la sombra a la columna el amor sobrevive al amante pero inevitablemente

No hay comentarios: