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Patricia B. Bustos Psicoanalista /Coordinadora de grupos terapeúticos/ Prof. Enseñanza Común y diferencial / Mediadora Judicial / Voluntaria y Socia Activa de Mèdicos del Mundo

jueves, 10 de noviembre de 2011

José Angel Buesa


Leyendo un libro, un día, de repente, hallé un ejemplo de melancolía: Un hombre que callaba y sonreía, muriéndose de sed junto a una fuente.

8 comentarios:

LE CHEMIN DES GRANDS JARDINS dijo...

La mélancolie est mal presque insondable mais cette fontaine est trop belle pour venir y mourir un jour.

Roger

Nakrama dijo...

¿Cuántos de nosotros hacemos eso con nuestra vida cada día?
Besos preciosa. Gracias por esta frase. Muaks

María dijo...

La vida está llena de esos momentos de sonrisas, también de silencios, de muertes, de sed, de melancolía.

Un beso.

Juan Ojeda dijo...

Claro, porque sueña beberse el agua de su juventud, no la de la fuente que lo refleja como un hombre,

Abrazo.

escuchando palabras dijo...

Roger un placer q continues tus visitas, besos

escuchando palabras dijo...

Natiii!!! que alegria...espero enontrarte, besitos

escuchando palabras dijo...

Tal cual Maria, la vida esta llena de emociones, besos

escuchando palabras dijo...

JUan gracias por estar y compartir siempre, besos