Un Amor Distinto

 

Me basta el beso que se queda en tu mirada
para alumbrar mi pecho con resignado brillo
y el canto en tus pupilas de niña enamorada
para sentirme muerto de tanto haber vivido...

Me basta tu sonrisa que sin querer naufraga
buscándole imposibles a aquello que perdido
pese a que nunca ha sido y el mundo lo separa
encuentra algún momento para escapar conmigo.

Me basta si te escucho como una voz gitana
llamando entre susurros al tiempo que ha partido
con la esperanza viva de que en tierras lejanas
se arrullen los ocasos con lo que nunca fuimos.

Me basta si imagino que aunque no fuiste mía
me escribiré en tu pecho como un amor distinto...
como un amor genuino al punto que yo mismo
aceleré mis pasos con tal de que sonrías.

Nos encontramos tarde...
Quizás en otras vidas...

Beto Aveiga - Ecuador